Cuando salió la primera vez esta palabra los peques iban soltando frases por separado intentado hacer nuestra particular lluvia de ideas.
Qué momento más bonito el previo de la introducción. La motivación tiene la magia, ves a los chicos entusiasmado pero con las ideas previas, donde dejamos libertad a que los peques puedan expresarse y participar de la conversación, tiene otro momento mágico. No tenemos prisas, no hay fichas ni libros esperando y los chicos dan su opcinión de algo que creen que conocen.
Martín hacía su reflexión intentado pensar que había pasado, por donde pasó la jirafa, si se metió en una maleta...
Carlos hablaba como era un aeropuerto que había aviones y pasajeros y tenían que entrar con un billete, pero también dijo que conducían los pasajeros jaja.
Sofía y casi la mayoría del grupo decían que era necesario una maleta y ropa...
Noé nos contó que él se iba en autobús pero su mama le pagaba al conductor.
Y ¿en un avión? los peques imaginaron que también haría falta un billete. ¿Pero donde se compra?
y ¿pasaporte? ¿que és un pasaporte?
Tarea del día hacer nuestro billetes de embarque y nuestro pasaporte.
Aquí ya la tenemos sellado.
Pensando que el vocabulario que implicaba este tema era muy complicado de explicar y para que los peques lo entendieran, que mejor que jugar para ampliar vocabulario.
Así salieron palabras como :
pasaporte,
embarque,
facturar maleta,
azafata y
piloto
Primero hicimos de la clase un aeropuerto, elegimos a las azafatas y a un policía para el puesto de control. Algunos chicos pitaban al pasar y el policía no tuvo más remedio que cachearles jeje.
Podéis ver en las fotos como en la facturación de maletas, Sofía que es la encargada, nos pega hasta una pegatina en la maleta jeje. Y en el control de aduanas Izan nos sella el pasaporte. ¡Qué ilusión! ya tenemos nuestro primer sello.
En esta primera actividad todos querían ser policías y tuvimos que echarlo a suertes.
Decir que estas actividades las tenemos que hacer en varias sesiones y en distintos días para no coincidir con especialistas y con las personas de apoyo. Cosa que nos ha venido bien porque el escenario siguiente era un avión por dentro.
El viernes por la mañana se encontraron ya las sillas colocadas y no entendían. Enumeramos las filas del avión y además les pusimos una letra a las sillas por lo que teníamos doble trabajo para localizar nuestro asiento. Miramos nuestro billetes y ya entendimos porque venía una letra escrita.
Aquí Noé también quería ser azafato, pero le tocó a Martín que repartió el desayuno a los pasajeros.
Os lo debisteis de pasar genial. :) Un abrazo.
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